Noor Hindi y Querido Dios, Queridos Huesos, Querido Amarillo

Otras Poéticas
5 min readJan 8, 2024

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Este año queremos empezar haciendo un spotlight sobre literatura palestina contemporánea, ya que notamos que su alcance aquí en México es un poco limitado.

Noor Hindi es una poeta y reportera palestino-estadounidense. Su poemario debut titulado Dear God. Dear Bones. Dear Yellow ya está en nuestro drive (aunque sin traducir), para que lo descarguen y se introduzcan a su obra. Actualmente parece estar trabajando en una antología de poesía palestina con George Abraham, el cual será publicado en 2025 por Haymarket Books, tentativamente (ya pusimos nuestro recordatorio para buscarlo el próximo año 😉).

Foto de Noor Hindi en blanco y negro. https://www.instagram.com/noorkhindi/
https://www.instagram.com/noorkhindi/

A continuación les presentamos algunos de los poemas que tradujimos al español.

Autointerrogatorio

En la terminal del aeropuerto, hay una mujer llorando.
Discúlpeme, discúlpeme, discúlpeme, yo —
Necesito concentrarme. En otra cosa.
El ajetreo de migración. Luces tan fuertes.
El sonido interminable. De la voz del conductor del noticiario.
Querido Dios. Queridos Huesos. Querida Madre. Por favor,
perdóname. Quiero dar noticia de que estoy muerta. La semana pasada,
había un infante en un vestido amarillo leyendo un poema.
Por una infinidad de minutos, no puedo ser indiferente
a nada. No al pasto, muriéndose amarillo.
No a las bombas, retorciendo extremidades.
No a las jaulas. No a — Sí. Hay una mujer llorando
en la terminal seis. Sí, uso un periódico
para taparme los ojos. Sí, pienso en el infante.
El corazoncito de plata que me puso en la palma.
Cómo lo tiré en la basura, segundos después.
Pero lo prometo. Lo prometo. Lo prometo. Lo —
hice como un acto de supervivencia. Tal vez de amor.

A la chingada tu seminario de arte, mi pueblo está muriendo

Los colonizadores escriben sobre las flores.
Yo te cuento sobre los niños que avientan rocas a los tanques israelíes
unos segundos antes de convertirse en margaritas.
Quiero ser como esos poetas que se preocupan por la luna.
Los palestinos no pueden ver la luna desde celdas y prisiones.
Es tan hermosa, la luna.
Son tan hermosas, las flores.
Recojo flores para mi padre fallecido cuando estoy triste.
Él ve Al Jazeera todo el día.
Quisiera que Jessica dejara de mensajearme Feliz Ramadan.
Sé que soy gringa porque cuando entro a una habitación algo muere.
Las metáforas sobre la muerte son para poetas que creen que a los fantasmas les preocupa el ruido.
Cuando yo muera, prometo perseguirte por siempre.
Un día escribiré sobre las flores como si nos pertenecieran.

Palestina

es una mujer. Un infante
en thaub. Huesos de aceituna
en mis manos. El tatreez
en la bufanda de mi abuela.
Es treinta y cuatro palestinos asesinados.
No despertamos. Políticos
estadounidenses. Patria
invadida. Israel tiene derecho
de defenderse.
Ahed Tamimi,
helado en la lengua,
sabor desconocido. ¿Agradeces que
tus padres hayan venido a
este país?
Trescientos
muertos. Prisión al aire libre. Bloqueo
de diez años. Rouzan al-Najjar
bala accidental. Granada
muy sangrienta. Mi abuela,
nació diez días antes de Nakba,
pólvora en su sangre.
Dejen de matarnos.
Dejen de decirnos cómo pelear.
Es el narguile de uva y menta, campo
que nunca he visitado. Mujer,
cuerpo magullado y patrullado.
Es queer. Es que se joda el patriarcado.
Es trescientos mil palestinos asesinados
Mi padre llorando
con Omayma El Khalil. Té negro dulce,
menta fresca pegada en el techo
de mi boca. “Solución” de dos Estados.
Pensamos que la casa
estaría vacía.
Es un extraño viviendo
en la casa de mi bisabuelo,
comiendo las granadas que una vez plantó.
¿Entonces cómo se dice
tu nombre otra vez?
Es
????? palestinos muertos. Girasoles
en sus tumbas. Semillas
que rompemos con los dientes,
escupiendo cada casquillo
antes de cavar otra tumba.

Autorretrato como un adolescente arábigo-musulmán en una preparatoria de gente blanca

Me voy a clase en mi camello todos los días.
— — — — — — — — tengo petróleo y petróleo y petróleo

escondido en mi mochila

¡¡¡¡¡¡¡junto con bombas!!!!!!!

(¡Estoy bromeando! ESTOY BROMEANDO… estoy bromeando lol)

CANTEN TODOS JUNTOS
— — — — — — — — We gettin’ Arab Money —

siéntetesegurosiéntetesegurosiéntetesegurosiénteteseguro

Pregúntame si soy árabe.
— — — — — — — — Pregúntame si mi papá es Osama bin Laden.

Pídeme que jure lealtad

a una luna que no escucha mis plegarias.

— — — Querida Sra. Wright plis no prohiba mi alfombra voladora

Jesucristo. Jesucristo. Jesús.

— — Me muero
mientras leo El guardián entre el centeno.

— — — — — — — — — — — eL cArRusEL nO deJAbA dE gIrAr —
— — — — Así que asesino a Holden Caulfield
— — — — — — — Porque tu canon no vale verga //
— — — — — — — comparado con Ghassan Kanafani~

Algún día seré Presidente!!!!!!

— — — — Le digo al subdirector

antes de que me expulsen.

Un Día, Una Vida: Cuando un Médico Fue Asesinado en Gaza, ¿Fue un Accidente?

para Rouzan al-Najjar
después / en desafío a un texto publicado por el New York Times sobre al-Najjar

¿Y qué sobre las flores
en su bufanda? ¿Su blanca
bata médica, ahora roja?

¿Uñas pintadas de rosa
como una lengua, un atardecer,
una granada? Cómo el gas lacrimógeno

forma nubes arriba
de los muertos. Cómo un país —
alimentado de balas y sangre a la fuerza —

le rompe el estómago
y la cuelga de una bandera.
Dime por qué las muertes

de mi pueblo se convierten en imposible, interminable
conflicto y las vidas desperdiciadas por la guerra.
Qué asesinatos se convierten en accidente,

sin querer a ojos
de aquellos que llaman a las lágrimas de mi padre
un infinito e imposible de resolver

ciclo de violencia. Dime sobre los treinta testigos
entrevistados y mil fotos y videos
que fueron necesarios para que llamaras nuestra resistencia

drama. Dime. En un país que permite cuatro horas
de electricidad al día, cómo la gente vive
en la oscuridad, agarrándose de las llaves de casas

que fueron destruidas por soldados, mientras una madre
se aferra a su hija, ahora muerta, le quita
los guantes blancos a Rouzan, llora su muerte ante el sol

y su luz impenetrable. Recuerda
el estetoscopio de juguete con el que jugaba Rouzan
de niña, luego mira

los ojos de un soldado israelí.
Y ríe.

Sinfonía del dolor

para Israa Ghrayeb

Querido olivo // ¿cuánto rojo
has visto? // ¿Puedes cuidar el de Israa
también? // Recuerdas esos hombres
con puños // en el aire // luego puños
aporreando piel // ¿moretones
que no se hicieron amarillos? // Colgué
cerezas en tus ramas // agujeros
en mis dientes // Si cortas una cereza,
hay un corazón, palpitando // y dulce.

Traducido por Rebeca Villalobos Torres.

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